Una despedida

Es muy difícil de pensar en las palabras correctas que expresen lo que se siente en momentos como estos donde un ser querido ya no volverá a saludarte y decir un simple hola...

La verdad es que puedo decir que disfrute de mi abuelo mucho, pero como todo nunca es suficiente y me hubiera gustado poder estar con el un par de años mas, sin embargo, a estas alturas el ya estaba muy cansado y demacrado de las enfermedades que tenia, además de su "bola de años". Se que un simple adiós no basta y que es poco para despedir a un gran hombre como mi abuelo, uno de los tantos braceros en la segunda guerra mundial, enamorado y casado con una hermosa y bella mujer por más de cincuenta años. Mi abuelo, un hombre del que me gustaría escribir todo un libro y aun así no acabaría de despedirme y honrar en tributo...

Ahora abuelo te nos has adelantado como parte de tu ciclo pero se que empiezas uno nuevo con un hermoso provenir, solo quiero que tu espíritu le de vida a mi abuela y la fortaleza que necesita al igual que todos nosotros para superar tu dolorosa partida. Descansa en paz querido y amado abuelo de parte de tu nieto Jaime y tu adorada familia Camarena.

Hace un poco mas de una semana que escribí esto desde el velorio de mi abuelo, a manera de  aliviar un poco mis pesares en aquel entonces.